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Nuevos proyectos para el Museo de Historia de la Ciudad
El Ayuntamiento de Girona está estudiando la posibilidad de construir un ascensor que facilite el acceso desde la calle Ballesteries o desde la cuesta de Sant Feliu hasta el Museo de Historia de la Ciudad. Según el director del museo, Pere Freixas, esto solucionaría los problemas para descubrir la entrada desde la calle de la Força con que se encuentra el visitante que llega por primera vez a la ciudad.
También está pendiente el proyecto de crear dos instalaciones adicionales del museo fuera del edificio del casco antiguo. Los escenarios elegidos son la antigua fábrica Marfà, de Santa Eugènia, y el antiguo refugio de la Guerra Civil que hay debajo del Jardí de l’Infància, que acogerían exposiciones permanentemente abiertas al público.
En la Marfà, donde se conserva una turbina que aún se puede poner en marcha aprovechando la fuerza del agua, se trasladarían todos los objetos y la maquinaria pesada que el Museo de Historia de la Ciudad tiene en la sala dedicada a la industrialización. La nueva sala de la Marfà ocuparía unos 500 m2 y serviría para explicar cómo la industrialización afectó a la ciudad de Girona, dentro del conjunto de Cataluña, durante el siglo XIX y buena parte del XX. De esta manera, el Museo de Historia de la Ciudad liberaría un espacio importante que se podría dedicar a la construcción de una sala de actos y un pequeño bar.
Algo parecido pasaría con el refugio de los subterráneos del Jardí de l’Infància, donde los gerundenses se escondían durante la guerra para evitar los temidos bombardeos de la aviación. En este caso habrá que comenzar por llevar a cabo una obra importante consistente en impermeabilizar el refugio, para pasar seguidamente a instalar en su interior las salas correspondientes a la Guerra Civil.